Definición de ginecología
La ginecología es el estudio de las enfermedades —diagnóstico y tratamiento— de los órganos reproductivos de la mujer, incluyendo las glándulas mamarias. Así como lo referente a la menopausia, desequilibrios hormonales, la esterilidad y los métodos anticonceptivos. Incluidos, por supuesto, los problemas oncológicos, como cáncer de mama, matriz, ovario, vagina, vulva, etc. Esta especialidad abarca habilidades quirúrgicas y no quirúrgicas. Casi siempre se estudia junto con la obstetricia, por eso vemos con mucha frecuencia, que los especialistas en esta rama de la medicina se hacen llamar “médicos ginecobstetras” o también “ginecoobstetras”.
Obstetricia
La obstetricia es la especialidad médica que estudia la gestación y el parto, incluyendo la fisiología y patología del aparato reproductor femenino durante el embarazo, así como el cuidado de la madre y el feto durante toda la gestación (embarazo); el proceso de alumbramiento y el puerperio o período inmediato después del parto.
Obstetricia es un cultismo que deriva del latín clásico obstetricia o “el oficio de la comadrona”, pero hay un neologismo decimonónico formado con raíces griegas: “tocología”, que significa lo mismo que obstetricia, del antiguo griego τόκος (tókos) ‘nacimiento de un niño’, ‘parto’, ‘el niño parido’; más -λογία (-logía) ‘tratado’, ‘estudio’. Así que un tocólogo es lo mismo que un obstetra. Ambas especialidades existen también en medicina veterinaria.
El término “ginecología” es un neologismo cuyo creador no está bien identificado
Haciendo a un lado los tiempos de la antigüedad clásica y del Medievo —más abajo escribiré algo de eso—, ya en tiempos modernos, en el año 1566 (pleno siglo XVI), apareció una recapitulación en latín de Tomam Guarinum de diversas obras antiguas y medievales sobre cuestiones ginecológicas, llamada Gynaeciorum hoc est…, “De cosas femeninas…” (aquí la pueden consultar), que en griego se traduce como Γυναίκεια = Gynaecia, de γυναικεία, γυναικήιος, “de o perteneciente a las mujeres (o muliebris en latín)”; una antiquísima palabra documentada en la Odisea, en Hesíodo, Heródoto y otros); de γυνή = gyné, “mujer”.
Si le dan una revisada, podrán ver que trata de forma ordenada temas como: la matriz, las doncellas; así como lo referente a otras cuestiones: esterilidad, concepción, preñez, aborto, obstetricia, parto, parto difícil (ahora conocido como distocia), secundinas, mortinatos, menstruación y mucho más.
No se tiene la certeza de quién acuñó el término, pero el médico y escritor alemán Johann Peter Lotichius (1598-1669) escribió en 1630 un libro en latín llamado “Gynaicologia, id est: De nobilitate & perfectione sexus feminei, contra mastiges diaskepsis physica”: «Ginecología, es decir: Sobre la nobleza y perfección del sexo femenino…”, en el que apologiza al sexo femenino, pero no trata de lo que esencialmente es la ginecología o el estudio de la fisiología y patología de los órganos reproductivos y las mamas de la mujer.
Cien años después (1730), el médico alemán D. Martino Schurigio (1656-1733), publicó su Gynaecologia Historica-Medica hoc est Congressus Muliebris… “Ginecología Histórica Médica, esto es Tratado sobre las Mujeres…”. Pero trató cuestiones sobre la sexualidad con un sesgo moralista más que médico, ya que menciona términos como castitas (continencia, castidad), salacitas (lascivia, sensualidad, erotismo) y voluptas (deleite, gozo, placer).
Carl Gustav Carus, el primero en usar el término Gynaekologie —en alemán— con el sentido actual
Fue hasta 1820 que el médico alemán Carl Gustav Carus (1789 -1869) escribió —abordó también temas sobre arte, entomología, evolución, metafísica, viajes, zoología— su Lehrbuch der Gynaekologie o Libro de Texto de Ginecología: “presentación sistemática de las enseñanzas del conocimiento y tratamiento de las condiciones saludables y patológicas peculiares, tanto de las mujeres no embarazadas, embarazadas y en período fértil, como del parto y los recién nacidos”, donde propone una visión holística de la mujer en la medicina y le da al término el sentido actual que tiene, ya que hace una exposición de conocimientos sobre la mujer gestante y el neonato (recién nacido). Ahora el o la ginecoobstetra se encarga de la parturienta, y el neonato queda en manos de los pediatras neonatólogos.

El texto de Ginecología de Carl Gustav Carus. Año 1820. Imagen tomada de Lehrbuch der Gynäkologie imagen – Búsqueda
Cuando nací, el partero del pueblo asistió a mi madre sin más. Y cuando ya era un niño de unos 8-11 años, lo seguí viendo a menudo, pues tuve una tía muy enfermiza. Un hombre de apellido Corona, bonachón, no muy alto, con grandes bigotes retorcidos. Decían que era de Guanajuato o de por allá el centro de México. Llegaba a la casa y, frotándose los dedos preguntaba: ¿fiebre?, ¿dolor de cabeza?, ¿vómitos?, ¿mareos?, ¿diarrea?, ¿piernas hinchadas?, ¿falta de apetito?, ¿se le va el sueño? Ahora sus restos descansan en el panteón del pueblo desde hace muchos años.
Componentes del neologismo “ginecología”
La palabra ginecología no existía en la antigüedad griega, por lo tanto, es un neologismo, un término inventado mediante el uso de antiguas palabras griegas. Alguien tuvo la idea de acuñarla, de seguro, porque en el siglo XVII ya había términos para denominar otras ciencias con el componente -logía (estudio o tratado). Archeologie (ciencia de las cosas antiguas) en francés, por ejemplo, se documenta en esa lengua desde 1599.
“Ginecología” se compone de gineco- + -logía
Gino-, gineco-
Gino-, gineco- viene de las formas latinizadas gynaeco, gyneco- y este del griego gynaiko- (γυναικo-), una forma combinante que se ha utilizado para acuñar neologismos referidos a la mujer o también a los órganos reproductivos femeninos, en plantas, humanos y animales; de γυνή = gyné, genitivo γυναικός = gynaikós, que significa “mujer”, documentada desde la Ilíada de Homero: ‘mujer’, sin importar la edad o si es soltera o casada’, ‘la esposa o también la concubina’. En los animales, la hembra (oveja, cabra, vaca). En plural (γυναῖκες, gynaikes) se usó para referirse a las sirvientas de la casa.
Asimismo, el término γῠναικωνῖτις = gynaikonitis designaba al cuarto o habitación de una casa destinada a las mujeres o el harem de un príncipe oriental; γῠναικοκτόνος = gynaikoktónos era el asesinato de una mujer; γῠναικοπᾰτέω = gynaikopatéo, verbo que significa ser o comportarse de manera afeminada.
Relación indoeuropea de γυνή = gyné y términos derivados
El sustantivo γυνή = gyné está asociado a la raíz indoeuropea *gwen- (mujer), también vinculada al sánscrito janis «mujer» y gná «diosa»; en avéstico jainish «esposa»; en antiguo prusiano genna «mujer»; antiguo inglés cwen “reina, esposa de un gobernante, etc.
Neologismos con gino-, gineco-
A) En plantas: androgino, monógino, hipogino, ginodínamo, ginoecia, ginogenesis, gineceo, ginogonidio, ginopodio. B- En humanos: ginecogénico, ginecológico, ginecología, ginecomastia (agrandamiento del tejido mamario en los hombres), ginecopatía (cualquier enfermedad propia de la mujer, por ejemplo, metritis, vulvitis, cáncer cervicouterino), ginefobia (fobia a las mujeres). También misoginia (odio hacia las mujeres), ginandromorfo (organismo anormal que muestra características masculinas y femeninas), ginecocracia (gobierno representado por una o varias mujeres).
-Logía
-Logía es un derivado del griego -λογία, ‘estudio’, ‘tratado’, de λόγος, ‘explicación’, ‘discurso’, ‘narrativa’, nombre verbal de λέγω (légō), ‘yo digo’, ‘yo converso’. La mayoría de las ciencias tienen en su nombre este componente: acarología, bacteriología, biología, citología, climatología, ecología, edafología, entomología, histología, fisiología, geología, herpetología, histología, inmunología, limnología, malacología, mastozoología, meteorología, microbiología, mineralogía, parasitología, sismología, virología, zoología, etc.
UN POCO DE HISTORIA
El papiro Kahun
La referencia histórica más antigua que se tiene sobre la ginecología se encuentra en el papiro médico Kahun de Egipto, cuya antigüedad se remonta alrededor del año 1825 antes de Cristo. Fue desenterrado por el arqueólogo egiptólogo británico William Matthew Flinders Petrie, (1853-1942) en 1889, en el que se encuentran datos muy interesantes sobre la medicina de aquel tiempo, especialmente la ginecología. En este valioso documento se tratan temas como la preñez, la fertilidad y tratamientos para otros desórdenes del aparato reproductor de la mujer.
Se mencionan tratamientos no quirúrgicos, como la ingestión de hierbas medicinales y otras sustancias curativas. Asimismo, describe técnicas anticonceptivas como una mezcla de estiércol de cocodrilo, miel y sustancias fermentadas de aplicación vaginal, como medio para bloquear los espermatozoides, que, por supuesto, no sabían de su existencia, pero su intuición era que el líquido seminal del varón llevaba cierta semilla para procrear un niño.
El papiro también incluye métodos para predecir el resultado de un embarazo examinando la consistencia y el color del flujo vaginal, algo así como las teorías humorales de la medicina antigua. (léase aquí).
La ginecología en el mundo de la antigüedad clásica
Hay, por supuesto, una gran cantidad de datos históricos sobre este tema, por lo tanto, sólo haré una sucinta relación de hechos.
- El Corpus Hipocraticum (siglos V-IV a. C.) aborda varios temas propios de la mujer y sus enfermedades, por ejemplo, ‘de la naturaleza femenina y sus enfermedades’, ‘padecimientos de las doncellas’, ‘del sietemesino, etc., en donde escribe el adjetivo γυναῖκειος = gynaikeios “de o lo relacionado con la mujer” y su plural neutro γυναῖκεῖα = gynaecia, que se mantendrá en uso en todas las obras posteriores, hasta que finalmente se escribe en 1730 en latín como gynaecologia arriba mencionado.
- Destaca en los siglos I-II d. C. el médico Sorano de Éfeso que escribe sobre anatomía de los genitales de la mujer, el embarazo, obstetricia o la asistencia durante el embarazo y el parto, el puerperio o los problemas propios de los primeros 40 días posparto, cuidado de los niños, ahora el campo de la pediatría. Muy pocos años después, el médico griego Galeno escribe sobre la descripción anatómica de la matriz y el desarrollo fetal.
- Durante la Edad Media, destacan escritos de médicos, especialmente del norte de África, del mismo modo que árabes y persas.
De seguro desde la prehistoria la humanidad se dio cuenta que la mujer tiene una anatomía genital distinta a la del hombre y una función
Seguramente que desde tiempos prehistóricos la humanidad entendió que la mujer, por tener una estructura genital evidentemente distinta a la de los varones, y por el hecho de que cargaban la cría en desarrollo en su vientre y luego lo parían y amamantaban, tenían que tener padecimientos distintos a los hombres. Sin embargo, debieron pasar muchos siglos para que se inventara la palabra “ginecología” que denominara al tratado sobre las enfermedades y el tratamiento de las dolencias propias de las mujeres, que los hombres no padecemos. Aunque claro que tenemos también las nuestras: prostatitis, cáncer de próstata, de testículo, de pene y bueno…
Recomiendo al lector que lea la revisión que hace el doctor Francisco Cortés (2014) de Dicciomed, sobre el origen y evolución del término ginecología. Aquí el enlace.
Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 7 de marzo de 2025.