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bocio

Definición de ‘bocio’

Un agrandamiento de la glándula tiroides que causa una hinchazón en la parte frontal del cuello. Se llama bocio exoftálmico (literalmente ojos que sobresalen de sus límites normales) cuando se acompaña de una muy visible protrusión de los globos oculares, ojos saltones.

Origen del sustantivo ‘bocio’

El origen de esta palabra no es muy claro. El DLE (2021) dice que proviene del bajo latín (latín literario medieval, siglos VI-XIII) ‘bocia’, “una hinchazón”. O tal vez del vocablo latino medieval ‘bocius’ que significaba “un bulto o tumor”, es decir, más o menos lo mismo. Probablemente un término relacionado u originado en el sustantivo femenino francés bosse (más el sufijo nominal latino -ium, -io en español) que significa “hinchazón o tumefacción que aparece como secuela de un golpe y formada por un derrame sanguíneo”; “una giba, joroba o corcova en las vértebras debida a una cifosis”; “protuberancia normal de ciertos animales, como los camellos”.

Épocas en que aparece bosse

Bosse es término probablemente originado del fráncico o tedesco (una lengua germánica extinta de la Edad Media). Se documenta a mediados del siglo XII con el significado de ‘protuberancia’, ‘deformación’; a finales del siglo XIII, ‘hinchazón causada por un golpe’; ‘gibosidad’ (entre 1174-1184); ‘protuberancia normal de ciertos animales, como camellos y dromedarios’ (1690). Quizá de *bottia (de origen oscuro), acaso vinculado al italiano boccia, ‘botón de flor’, pero actualmente significa ‘garrafa’, más el provenzal, bossa, ‘tumor’, ‘bulto’, de la hipotética palabra *bottja, ‘brote’, ‘yema’. Hay que recordar que los asteriscos indican que son voces hipotéticas, no documentadas en ninguna fuente escrita.

El libro Practica in arte chirugica compendiosa (Libro segundo sobre las apostemas), escrito por el médico italiano Giovanni (Juan) de Vigo (1460-1525) y publicado en español en 1537 dice sobre el bocio:

“…Pero si nace en el cuello se llama bocio: si en la cabeza talpa*: si en los compañones** hernia fistulosa y carnosa se llama…”.

*Talpa, talparia, ‘absceso que se forma en el interior de los tegumentos de la cabeza’.

**Compañón ‘nombre masculino poco usado, que significa testículo.

Nótese que bocio toma distintos significados.

Goitre, goiter

En francés e inglés británico el bocio se llama goitre, término que procede del antiguo francés goitron (garganta), del latín vulgar guttrio, guttūriōn-, a su vez de guttur, gutturis (cuello, garganta, gaznate, garguero, en sentido figurado, ‘voracidad’), de donde proviene el adjetivo ‘gutural’. En inglés americano existe en lugar de goitre la variante goiter. Por lo tanto, tiene una etimología más clara goitre o goiter que bocio. 

Datos adicionales sobre el bocio

El bocio (agrandamiento de la glándula tiroides no causado por neoplasias) puede ser endémico en algunas regiones montañosas, por ejemplo, en el Himalaya y los Andes o en otros lugares. Puede estar asociado a hipotiroidismo (funcionamiento deficiente), hipertiroidismo (f. aumentado) o eutiroidismo (f. normal de la tiroides). En algunos lugares se debe a una ingestión inadecuada de yodo (la causa más común a nivel mundial) que provoca bajos niveles sanguíneos de la hormona tiroidea, lo que a su vez aumenta la secreción de la hormona estimulante de la tiroides (HTS o TSH, por sus siglas en inglés) o tirotropina, que incita el aumento de tamaño de la glándula. Aumenta la secreción de TSH como un intento compensatorio de la hipófisis, ante la pobre actividad tiroidea.

El peso normal de la glándula tiroides es de unos 20 gramos, pero en algunos casos de bocio, la glándula puede llegar a pesar alrededor de 1 kg o más (50 veces más). La inflamación puede ser generalizada o a veces toma un aspecto nodular. Una tiroides muy agrandada puede provocar dificultad para deglutir o para respirar, y una sensación de traer una cuña en el cuello.

Otras causas de bocio

Además de la deficiencia de yodo, existen diversas causas que pueden producir bocio:

  • Un defecto en las etapas de la síntesis de la hormona tiroidea.
  • La formación de uno o varios nódulos en la glándula.
  • Infiltraciones de linfocitos u otras células productoras de inflamación en la tiroides.
  • Estimulación del crecimiento y función de la glándula causada por anticuerpos, del mismo modo que por la tirotropina (de la hipófisis). Como en la enfermedad de Graves (por el médico irlandés Robert James Graves, quien la describió en 1835), un padecimiento autoinmune que se manifiesta por hipertiroidismo, exoftalmos, edema palpebral, ceguera ocasional, adelgazamiento del cabello, bocio, sudoración, taquicardia, pérdida de peso, oligomenorrea (menstruaciones poco frecuentes, cada 45 o más días), tremor, etc. (Robert D. Utiger). 

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 27 de agosto de 2021.

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Soy Jesús Gerardo Treviño Rodríguez, un profesor mexicano jubilado y además, ingeniero agrónomo con posgrado en parasitología agrícola. Durante más de un lustro colaboré en una página de etimologías, bien conocida por las personas que se interesan en esta fascinante área del conocimiento. Sin embargo, ahora deseo abordar temas etimológicos, pero además añadir, especialmente, contenidos históricos que fortalezcan el entendimiento de las palabras. No se sorprendan si encuentran contenidos tan disímiles. Me encanta saber, aunque sea algo de todo, o bueno, casi de todo. A los que les gusta la concisión, muy probablemente no tengan la paciencia de leer mis explicaciones, porque me agradan los detalles, y con mucha frecuencia anoto cosas algo alejadas del tema. Pero como aquí decimos "una cosa lleva a otra". Y no importa que eso suceda a menudo. Me encanta pasearme por el mundo de los datos. Echar a andar la imaginación. Precisamente por eso, el lema de Etimologías ¡mucho más! Vaya para todos los que venturosamente se topen con mis notas, una modesta invitación para que lean mis artículos, y expresen su opinión. Dedico este trabajo a la memoria de mi madre, Victoria Rodríguez Quintanilla (mayo de 1904 - abril de 1992), que fue profesora por más de 40 años. A mis hijos, nietos y demás personas con las que tengo vínculos profundos. A todos mis queridos exalumnos, que tuvieron la paciencia de escuchar mis enseñanzas.

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