Generalidades sobre la palabra y el concepto ‘pornografía’

Pornografía es un nombre femenino que significa:

«Una representación de conductas sexuales o eróticas obscenas, carentes de pudor. Tal representación puede ser a través de imágenes, videos, libros o escritos, con el propósito de causar excitación sexual. También, la representación de actos en una forma espectacular que provocan el despertar de una rápida e intensa reacción emocional. Esta palabra se registra en el año 1800 en francés como pornographie, de donde pasó al inglés (pornography) en 1842, y poco después al español (pornografía), que aparece en 1853 en el diccionario de Ramón Joaquín Domínguez, en donde podemos leer: “pornografía, sustantivo femenino, tratado sobre la prostitución”. Por lo tanto, la pornografía, en su significado original, hacía referencia a la actividad de las prostitutas. Aunque ahora no necesariamente es así.

Entendiéndose por representación, “hacer presente algo con palabras o figuras que la imaginación retiene (DLE, 2021). 

A veces se usa la forma abreviada ‘porno’, como novela, película, video, fotografía porno.

Etimología del vocablo ‘pornografía’

El término pornografía proviene del griego antiguo πορνογράϕος = pornográphos (Bailly, Dictionaire Grec Francais, pág. 1607), que significó ‘autor de escritos sobre la prostitución’. Palabra formada por:

A) Πόρνη = pórne: a) ‘prostituta’, b) ‘la que presta o más bien vende su cuerpo para otorgar satisfacción sexual’, c) ‘la prostituta vulgar, carente de educación’. Porque había también en la antigüedad griega ‘prostitutas finas, elegantes y cultas’, las cortesanas, a las que llamaban ἑταίρα = hetaíra, o ‘amante de compañía’, y que ahora el DLE registra como heteras o hetairas. La realidad es que en la antigua Grecia había prostitutas esclavas y libres. Además, también existía la prostitución masculina (πόρνος = pórnos) generalmente relacionada con la homosexualidad.

B) γραϕή, γράϕω, γραφειν (graphé, grápho, graphein), ‘escribir’, ‘la escritura’, ‘el arte de escribir’, de donde γραϕικός (graphikós) o ‘lo concerniente a la acción de escribir’. Con este término existen palabras de uso actual: taquigrafía (método para escribir con rapidez), caligrafía (escribir con bonita letra), geografía (la descripción de la tierra); mecanografía (escribir usando una máquina), biografía (una narración sobre la vida de alguna persona), gráfica, monografía, etc. En la palabra pornografía está presente el sufijo o terminación -ia, que indica cualidad, es decir, “la cualidad o condición (-ia) de describir o escribir (graphein) sobre la prostitución (pórne, pórnos)”.

Vínculos indoeuropeos

La palabra πόρνη se vincula a la raíz indoeuropea *per-2–, con el significado general de ‘vender’, según el lingüista Pokorny, pág. 816. Mientras que γραϕή (graphé) se asocia a la raíz IE *gerebh- relacionada con ‘rasgadura’, ‘escribir’, ‘arañar’. También vinculada con la voz griega gramma (γράμμα) cuyo significado es: ‘algo grabado’, ‘una línea’, ‘una letra’, como en las palabras telegrama, gramática, Trichogramma (un género de avispas himenópteras), pentagrama, etc.

Pornocracia

El término decimonónico pornocracia significa ‘el dominio o influencia de las prostitutas, o cortesanas’. De κράτος, κρᾰτεῖν (krátos, kratein), que quiere decir, ‘dominio’, ‘mando’, ‘gobierno’, ‘poder’, de donde derivan las voces democracia, plutocracia, aristocracia, burocracia y otras. La palabra (pornocracia), surgió en el siglo XIX, para hacer referencia a la primera mitad del siglo X, el saeculum obscurum (algo así como la generación o ciclo oscuro) del pontificado, en plena época medieval, cuando un grupo de cortesanas controlaba el gobierno de Roma y la elección de los papas. Así llamada por la suprema influencia de tres mujeres de noble familia, pero que llevaban una vida disoluta y libertina:

Teodora (‘la ramera sinvergüenza’, aparentemente, uno de sus amantes fue el pontífice Juan X) y sus hijas Teodora y Maròzia (quien, según dicen, fue amante del papa Sergio III). Durante el saeculum obscurum, según algunas versiones, reinó la simonía, desvergüenza, el descaro y la corrupción en las altas esferas del gobierno eclesiástico, por la influencia de estas mujeres (y probablemente otras) licenciosas y atrevidas. Pero no se debe tomar esta intriga o enredo como algo estrictamente verdadero. Es muy probable que parte de lo que se dice acerca de estas cosas, sea irreal. Los invito a leer esta versión sobre lo acontecido en este intríngulis, escrito por el español Josep M. Albaigès i Olivart. 

La palabra pornocracia parece haber sido acuñado en alemán (Pornokratie) en un libro sobre la Historia de la Iglesia Cristiana en los años 1860s, del austriaco Alfred Edersheim (1825-1889).

Palabras latinas con significado semejante a pornográphos

1. Cătămĭtus, era el nombre antiguo de Ganímedes, el hermoso amante de Zeus (para los romanos, el dios Júpiter), con quien tenía una relación homosexual.

2. Scortum masculinus, ‘el prostituto’, ‘el hombre que vendía su cuerpo para dar placer carnal’. De la palabra scortum, que en origen significó ‘piel’, ‘cuero’, pero en sentido figurado, ‘el que se prostituye’, ‘hombre deshonesto y libertino’, además, ‘mujer pública’, ‘prostituta’, ‘cortesana’.

3. Paedīco, ōnis, ‘homosexual’, de paedor, ‘suciedad’, ‘porquería’, ‘inmundicia’ y el verbo paedīco, āre, ‘entregarse a los vicios’.

Perspectiva histórica acerca de la pornografía

Resulta una tarea difícil tratar de hacer una reseña histórica de las representaciones eróticas o escenas de naturaleza sexual a través de los siglos y milenios, que incluyen pinturas, esculturas, fotografías, escritos, etc., creadas por casi todas las civilizaciones antiguas y modernas. En muchas culturas primitivas, con frecuencia relacionaban el acto sexual con fuerzas sobrenaturales, por ello, su religión está vinculada con tales representaciones.

En regiones asiáticas, como China, Japón, Nepal y otras, las representaciones de carácter sexual, tienen significados espirituales concretos dentro de las religiones nativas. Los antiguos griegos y romanos produjeron muchas obras de arte de tipo erótico; algunas veces enlazadas a sus creencias religiosas y prácticas culturales.

Presente y pasado

En nuestros días, con la vertiginosa evolución de la tecnología, la pornografía ha llegado a una producción y difusión insospechada, mediante el cinematógrafo, la fotografía, las computadoras y otros recursos, dando además cabida a una lamentable oportunidad para ser usada con fines ilícitos.

Entre los ejemplos más antiguos de representaciones eróticas que aún se conservan, se encuentran pinturas y esculturas rupestres (hechas en rocas y cavernas) del Paleolítico (la primera o más antigua Edad de Piedra) muchos miles de años atrás. Algunas de las imágenes más frecuentes son de animales, así como escenas de caza y representaciones de órganos genitales humanos.

En ciertas pinturas y artefactos del Paleolítico, se representan humanos desnudos con dimensiones exageradas de sus genitales. El arte rupestre recientemente descubierto en Inglaterra se estima que data de unos 12 000 años. Contienen algunos símbolos que parecen ser modos estilizados de los genitales femeninos. Pero como no hay prueba directa del uso de estos objetos, se cree que quizás pueden haber sido utilizados en rituales religiosos, o probablemente con algún fin más directamente sexual.

Hallazgos arqueológicos recientes revelan una escena de unos 7500-7000 años de antigüedad, en la que se representa una figura masculina ladeada sobre una fémina, con una posición que sugiere una relación sexual.

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 20 de enero de 2021.