breves, cultismos
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elegante

Significado de ‘elegante’

Elegante es un adjetivo que, referido a cosas, como árboles, animales, cuadros, melodías, movimientos, etc., significa ‘provisto de gracia, nobleza y sencillez o naturalidad’; ‘de buen gusto’. En un sentido más preciso y aplicado a las personas: ‘aquel que viste sujetándose por completo a la moda o con distinción y buen gusto’.

Etimología de ‘elegante¿

La palabra elegante proviene del latín elegans, -antis (su acusativo elegantem), a su vez del verbo ēlĭgo, eligĕre que significa ‘elegir’, ‘escoger’, ‘remover’, ‘quitar de entre varias cosas‘, como en la expresión eligere herbas o ‘arrancar las hierbas seleccionándolas’. Del mismo modo, entonces, ‘algo o alguien elegante’, implica la selección de lo mejor para tener elegancia o ‘la cualidad de ser elegante’, ēlĕgantia en latín, con el sufijo de cualidad -ia.

En el verbo eligĕre tenemos en primer término el prefijo latino e-, ex- (preposición de ablativo que siempre va antes de consonantes, nunca antes de vocales), en este caso significando: ‘de’,  ‘proveniencia del interior de’, ‘desde’, ‘fuera de’; más el verbo lĕgo, legĕre, que significa ‘recoger’, ‘tomar’, ‘reunir’, ‘escoger’.

El significado original de ēlĕgans

Asimismo, el adjetivo ēlĕgans, -antis, en principio, y con un sentido inicial peyorativo, significó: ‘personas suntuosas, lujosas, exigentes, selectas, refinadas, de buen gusto, elegantes; hablando de cosas: ‘algo limpio, pulcro, impecable, cómodo’. El escritor romano Cicerón (ss. II-I a. C.) escribió: homo elegantissimus (hombre con gustos delicados) y verborum delectus elegans (elección de palabras exquisitas).

vínculo indoeuropeo de ēlĕgans, -antis y términos relacionados

Estos vocablos están asociados a la raíz indoeuropea *leg- (Pokorny leg̑‑ 658),  con la idea de “colectar, seleccionar, escoger, recoger”, con derivados que tienen relación con ‘hablar, decir’, donde se agrupa una gran familia de palabras, por ejemplo: a) de origen latino, inteligencia, colegio, leer, legible, sortilegio, elección, elegir, élite, elegante, privilegiar, lectura, colección, ley, lignina, leña; y b) de origen griego, lógica, filología, paidología, etimología, lexema, léxico, logorrea, geología, meteorología, entomología, herpetología, dialecto, diálogo, silogismo, etc.

Pero ¡Cuidado! hay palabras que no tienen nada que ver con las arriba citadas y que inician con ele-: elefante, Elephantopus, Eleuterio, eleagnáceo, eleático, eléboro, elegía y muchas otras. Por cierto, todas estas son de origen griego.

Arbiter elegantiarum

Muchas fuentes afirman que el escritor latino de sátiras Gaius Petronius Arbiter (Cayo Petronio Árbitro, ¿20-65/66? d. C.), que según algunos escribió la obra Satiricón, se ganó el epíteto de Arbiter elegantiarum o “el árbitro de la elegancia”, por sus gustos refinados. De acuerdo con el historiador romano Cornelio Tácito (55-120 d. C.), a pesar de la amistad que Petronio tenía con el emperador Nerón, fue señalado de conspirar junto con Séneca y el poeta Lucano (39-65 d. C.) para asesinarlo, ante lo cual, Petronio mejor decidió suicidarse en el 65/66.

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 20 de junio de 2020.

Categoría: breves, cultismos

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Soy Jesús Gerardo Treviño Rodríguez, un profesor mexicano jubilado y además, ingeniero agrónomo con posgrado en parasitología agrícola. Durante más de un lustro colaboré en una página de etimologías, bien conocida por las personas que se interesan en esta fascinante área del conocimiento. Sin embargo, ahora deseo abordar temas etimológicos, pero además añadir, especialmente, contenidos históricos que fortalezcan el entendimiento de las palabras. No se sorprendan si encuentran contenidos tan disímiles. Me encanta saber, aunque sea algo de todo, o bueno, casi de todo. A los que les gusta la concisión, muy probablemente no tengan la paciencia de leer mis explicaciones, porque me agradan los detalles, y con mucha frecuencia anoto cosas algo alejadas del tema. Pero como aquí decimos "una cosa lleva a otra". Y no importa que eso suceda a menudo. Me encanta pasearme por el mundo de los datos. Echar a andar la imaginación. Precisamente por eso, el lema de Etimologías ¡mucho más! Vaya para todos los que venturosamente se topen con mis notas, una modesta invitación para que lean mis artículos, y expresen su opinión. Dedico este trabajo a la memoria de mi madre, Victoria Rodríguez Quintanilla (mayo de 1904 - abril de 1992), que fue profesora por más de 40 años. A mis hijos, nietos y demás personas con las que tengo vínculos profundos. A todos mis queridos exalumnos, que tuvieron la paciencia de escuchar mis enseñanzas.

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