ciencia
Dejar un comentario

escalofrío, calofrío

¿Qué es un escalofrío?

Un escalofrío es una sensación de frío, generalmente súbita y violenta. Usualmente acompañada de rápidas e intensas contracciones musculares involuntarias (temblor, tiriteo), con paroxismos de estremecimiento y castañeo de dientes. Puede deberse al inicio de la fiebre causada por una infección, mordedura de algunas serpientes, paludismo, a una reacción de hipersensibilidad a ciertas drogas, a una transfusión sanguínea, exposición a temperaturas frías, alteraciones neuroendocrinas en los centros termorreguladores del hipotálamo, etc. Sentí un leve escalofrío al abrir la ventana. La enfermedad comienza con escalofríos seguidos de fiebre alta.

También una sensación de desagrado por la presencia de algo indeseable o que causa horror. Quedó paralizado ante aquella escena escalofriante, dantesca, horrorosa.

El término “escalofrío” se documenta en español desde el siglo XVII

La palabra “escalofrío» se registra en español desde principios del siglo XVII. Deriva de su forma antigua calofrío (desde el siglo XV), una voz compuesta de la raíz de “calor” y “frío” (calor, -oris + frigidus), de donde cale y frige, que puede interpretarse como “caliéntate” y “enfríate”; debido a que cuando alguien tiene escalofríos por fiebre, tiembla porque siente frío, aunque en realidad su cuerpo está más caliente de lo normal.

Escalofrío: es- más -calofrío 

La voz escalofrío se compone del prefijo es-, del latín ex– que en este caso tiene función intensificadora como en los vocablos “esforzar” y “estremecer”, más -calofrío, su forma arcaica.. 

Escalofrío-calofrío en los diccionarios españoles

Primero fue calofrío y luego escalofrío 

Calofrío aparece en el diccionario de Juan Palet español-francés de 1604. La RAE de 1729 dice: Calofrío. “El acometimiento breve y repetido que hace el frío en el que está mal dispuesto (entiéndase el enfermo), el cual, resistido del calor natural, huye y vuelve: Lo que se experimenta más en el principio del frío, que precede a la calentura intermitente. Es voz compuesta de calor y frío, y se usa regularmente en plural calofríos, aunque el vulgo dice escalofríos. Latín «algor praecursor febris» (frío precursor de la fiebre). Desde entonces tuve unos bostezos y calofríos, que pronosticaron mi enfermedad.

Algor en latín significa “frío”, “muy frío”.

Praecursor “el que va adelante”, “precursor”, “el indicio de algo”.

Febris fiebre”.

Por lo tanto, el calofrío es “frío precursor de la fiebre”.

En cambio, “escalofrío» aparece en la RAE de 1732 y dice: “Escalofrío, lo mismo que calofrío”. Y la edición de 1791: “Indisposición del cuerpo en que a un mismo tiempo se siente algún frío y calor extraño”.

¿Qué sucede en el cuerpo cuando se origina un escalofrío previo a la fiebre?

Un escalofrío es una manifestación de un proceso fisiopatológico subyacente, que no voy a explicar a detalle, pero vale la pena hacer algunas consideraciones.

Homeostasis, un equilibrio dinámico

El cuerpo de todos los organismos se mantiene en un equilibrio dinámico que en biología se llama homeostasis (literalmente “estabilidad mediante la autorregulación”), de manera que se conservan —con algunas variaciones normales— ciertas condiciones en equilibrio o armonía, que permiten el mantenimiento de la salud y la vida. Por ejemplo, en el cuerpo humano: presión arterial 120/70; pH del suero sanguíneo 7,4; frecuencia cardíaca 60-85 /minuto, temperatura corporal alrededor de los 37 °C, la cual se eleva cuando nos da fiebre o calentura, y es en estos casos cuando se producen muchas veces los escalofríos, nuncios de la fiebre que viene. Veamos.

En el hipotálamo se encuentra el centro regulador de la temperatura corporal

La temperatura del cuerpo está regulada por un centro termorregulador que se encuentra en el hipotálamo. Pero cuando hay destrucción de tejidos, ciertos procesos inflamatorios, deshidratación, infecciones por bacterias (pirógenos exógenos), virus u otros organismos, el cuerpo reacciona cambiando súbitamente el punto de ajuste del control termorregulador del hipotálamo, del nivel habitual a un punto más alto, digamos de 37 a 39,5 °C. Es como si uno le subiera el ajuste al calentador de agua porque se va a bañar.

Pero el cuerpo necesita subir su temperatura y eso le toma de 2 a 3 horas 

Sin embargo, al cuerpo le toma unas 2-3 horas alcanzar el nuevo punto de ajuste, debido a que la temperatura de la sangre es ahora menor que el nuevo punto de 39,5 °C. Así que se inicia una respuesta compensatoria para tratar de nivelar la temperatura. Por eso, durante este período, suceden las contracciones musculares (temblores, castañeo de dientes) que generan calor, de modo que la persona experimenta escalofríos y siente frío, aunque su temperatura pueda estar ya por arriba de la normal. Asimismo, la piel se hace más fría debido a la vasoconstricción que ahorra calor.

El escalofrío puede seguir hasta que la temperatura corporal alcance el punto de ajuste de 39,4, cuando los escalofríos desaparecen y la persona ya no siente frío. Ahora bien, mientras que el factor (agentes infecciosos, toxinas…) que mantiene el punto de ajuste elevado continúe, la temperatura corporal es regulada de una manera normal, pero ajustada al nivel alto, es decir, el enfermo permanece afiebrado. Cuando el punto de ajuste baja, porque la infección ha cedido, entonces el cuerpo reacciona y comienza la sudoración como medio para bajar la fiebre y se recupera la temperatura normal de 37 °C.

La fiebre es una respuesta defensiva del cuerpo

La fiebre o calentura es benéfica (mientras no sea muy alta) porque, entre otras cosas, mata muchos microorganismos y tiene efectos adversos sobre su reproducción. También baja los niveles sanguíneos de zinc, cobre y hierro que son necesarios para la replicación bacteriana. Asimismo, el cuerpo, en lugar de “quemar” o consumir glucosa, cambia su metabolismo y consume lípidos y proteínas, privando a las bacterias de su fuente alimenticia. Es por eso que la supresión de la fiebre —si no es muy alta, que pueda causar daño neuronal o convulsiones— por medio de fármacos antipiréticos o febrífugos (aspirina, paracetamol) debe ser evaluada por el médico.

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 9 de enero de 2025.

Categoría: ciencia

por

Soy Jesús Gerardo Treviño Rodríguez, un profesor mexicano jubilado y además, ingeniero agrónomo con posgrado en parasitología agrícola. Durante más de un lustro colaboré en una página de etimologías, bien conocida por las personas que se interesan en esta fascinante área del conocimiento. Sin embargo, ahora deseo abordar temas etimológicos, pero además añadir, especialmente, contenidos históricos que fortalezcan el entendimiento de las palabras. No se sorprendan si encuentran contenidos tan dispares. Me encanta saber, aunque sea algo de todo, o bueno, casi de todo. A los que les gusta la concisión muy probablemente no tengan la paciencia de leer mis explicaciones, porque me agradan los detalles, y con mucha frecuencia anoto cosas algo alejadas del tema. Pero como aquí decimos "una cosa lleva a otra". Y no importa que eso suceda a menudo. Me encanta pasearme por el mundo de los datos. Echar a andar la imaginación. Precisamente por eso, el lema de Etimologías y ¡mucho más! Vaya para todos los que venturosamente se topen con mis notas, una modesta invitación para que lean mis artículos, y expresen su opinión. Dedico este trabajo a la memoria de mi madre, Victoria Rodríguez Quintanilla (mayo de 1904 - abril de 1992), que fue profesora por más de 40 años. A mis hijos, nietos y demás personas con las que tengo vínculos profundos. A todos mis queridos exalumnos, que tuvieron la paciencia de escuchar mis enseñanzas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *