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nieto, bisnieto, tataranieto, chozno, hipocorístico

Definición de ‘nieto’

La palabra nieto y su femenino nieta es un sustantivo que significa: “En relación de una persona, hijo o hija de su hijo o de su hija. Mi nieto Raúl es hijo de mi hija Cristina. Tengo un nieto que se llama Gabriel y dos que se llaman Jesús Gerardo.

Por extensión, ‘nieto(s)’ son los descendientes de una línea de terceras (bisnietos), cuartas (tataranietos) y demás generaciones.

Para una visión más amplia sobre ‘nieto’, creo indispensable que lean mis artículos ‘abuelo‘ y ‘nepotismo

Etimología del término ‘nieto’

‘Nieto(a)’ deriva del latín medieval (vulgar), neptus (masculino) del femenino nepta (Du Cange), neptia, (‘nieta’, ‘sobrina’), un reacomodo o recomposición de neptis, ‘nieta’, ‘sobrina’, a su vez un acortamiento de los términos nĕpōs, nepōtis: ‘nieto’, ‘sobrino’, que menciono en el artículo “nepotismo”. En latín, los nepotes, en la época de los romanos, eran los nietos y sobrinos, los descendientes; incluso, hablando de plantas y animales, significaba: ‘retoños’, ‘renuevos’, ‘las crías’. En sentido figurado eran los ‘derrochadores’, que no se limitaban en los gastos. Seguramente en alusión de los hijos, nietos y demás descendencia que se gastaban las fortunas de sus progenitores. (Gaffiot, p. 1024, 1025).

Cicerón escribió: non minus in populi Romani patrimonio nepos quam. Que se traduce «tan pródigo (dadivoso) con el patrimonio del pueblo romano como con el suyo (el nieto) propio».

*Nepote también es una palabra española que significa «pariente y privado del papa». DLE 2022.

Bisnieto

‘Bisnieto’, ‘bisnieta’ es el hijo o la hija de un nieto(a), como ‘el segundo nieto’. Palabra formada por ‘nieto’ más el elemento compositivo (prefijo) bi- por bis- (forma arcaica dui-, del IE *dwi-, ‘dos’);  adverbio latino que quiere decir ‘dos’ o ‘dos veces’, ‘de dos maneras’, ya que el bisnieto es como el “dosnieto”, con el sentido de que nace del primer n. Palabras con este adverbio hay muchas: bicameral, bicentenario, bicicleta, bifocal, bigamia, bimestre, bisexual, bilingüe, bipolar, bilabial, bióxido, bisnieto (una persona con respecto a su bisabuelo

¡Biblioteca, biología y bismuto no! Eso es otra cosa.

Tataranieto

‘Tataranieto’, ‘tataranieta’ y sus formas anteriores ‘tartaranieta’ (César Oudín 1607), ‘testaranieto’ (Francisco del Rosal, 1611)‘, trastrasnieto’, etc., es un término formado por la influencia de ‘tatarabuelo’. Es el “tercer nieto(a)”, “el nieto del nieto de una persona”; que tiene el cuarto grado de consanguinidad en línea recta descendente, es decir, con un 6,25% del legado o contenido genético del tatarabuelo

La palabra tataranieto (a veces también ‘tresnieto’, quizá por la influencia del latín trĭtăvus, ‘tatarabuelo’) está formada por ‘nieto’ más tatara- de la preposición latina trans-, tras-, ‘más allá’, ‘al otro lado’, ‘a través de’, ‘del otro lado’, ‘de más allá’, como en las palabras transformar, transiberiano, transpeninsular, transparente, transverso, transeúnte, trashumante, traspaso transliterar (representar los signos de un sistema de escritura mediante los signos de otro, como lo hago con frecuencia en mis artículos: en griego ὄρνις = ornis, ‘ave’). Por lo tanto, “el tataranieto es el descendiente más allá o todavía más lejano que el bisnieto”.

Chozno

Los idiomas no suelen tener una palabra para denominar a un descendiente más allá del tataranieto. El término chozno es de uso relativamente raro en español, y significa “hijo(a) del tataranieto” o “nieto del bisnieto de una persona”. Esta palabra no tiene un origen muy claro. El diccionario español-inglés de Richard Percival de 1591 ya la tiene incluída.

Chozno es el cuatro nieto, es decir, el hijo(a) del tercer nieto o tataranieto. Según el lexicógrafo y lingüista español Joan Corominas (1905-1997) el término chozno (algo así como chus-nieto), quizá deriva de chuz o chus, ‘más’, como en la vieja expresión “no decir chus nimus” o “no decir nada más”. Un chozno sería entonces “un nieto más allá del tataranieto». El DLE prefiere callar y dice que chozno es de origen incierto.

Corominas (página 398-399) afirma que: “En definitiva es más probable que chozno y su variante *chozlo (de donde chorno), sean términos hipocorísticos usados por el anciano al dirigirse a sus descendientes, en tono de mimo o arrullo; creaciones primarias del idioma de carácter expresivo, y pertenecientes en rigor al lenguaje infantil…” 

HIPOCORÍSTICO.

Algunos ejemplos de términos hipocorísticos aplicados a nombres personales o antroponimias

La palabra hipocorístico designa al hecho de cambiar un nombre real por uno que resulte más bello o cariñoso, del griego antiguo ὑποκοριστικός hypokoristikós’, con este mismo significado o también quiere decir ‘diminutivo’. Gerardito por Gerardo, Sarita por Sara…

Bebé, Baby (niño), Chelo (Consuelo), Chucho, Chuy (Jesús), Fede, Quico (Federico), Gerardito, Gera (Gerardo)  Lola, Lolita (Dolores), Lula, Lulita (Obdulia), Lupe, Lupito(a) por Guadalupe, Mati (Matilde), Pepa (Josefa), Quique (Enrique), Sarita, Saris (Sara), Soco, Coco (Socorro), Teresita, Tere (Teresa), Toño, Toñín (Antonio), Toya (Victoria).

Entre marido y mujer: cielo, mi cielo, vida, mi vida, amor, mi amor, ternurita, cariño ¿Serán sinceros? ¡Lo dudo muy, pero muy seriamente! Con frecuencia son palabras melosas.

Chozno bien puede ser un hipocorístico de chus-nieto. 

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 2 de julio de 2023.

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Soy Jesús Gerardo Treviño Rodríguez, un profesor mexicano jubilado y además, ingeniero agrónomo con posgrado en parasitología agrícola. Durante más de un lustro colaboré en una página de etimologías, bien conocida por las personas que se interesan en esta fascinante área del conocimiento. Sin embargo, ahora deseo abordar temas etimológicos, pero además añadir, especialmente, contenidos históricos que fortalezcan el entendimiento de las palabras. No se sorprendan si encuentran contenidos tan disímiles. Me encanta saber, aunque sea algo de todo, o bueno, casi de todo. A los que les gusta la concisión, muy probablemente no tengan la paciencia de leer mis explicaciones, porque me agradan los detalles, y con mucha frecuencia anoto cosas algo alejadas del tema. Pero como aquí decimos "una cosa lleva a otra". Y no importa que eso suceda a menudo. Me encanta pasearme por el mundo de los datos. Echar a andar la imaginación. Precisamente por eso, el lema de Etimologías ¡mucho más! Vaya para todos los que venturosamente se topen con mis notas, una modesta invitación para que lean mis artículos, y expresen su opinión. Dedico este trabajo a la memoria de mi madre, Victoria Rodríguez Quintanilla (mayo de 1904 - abril de 1992), que fue profesora por más de 40 años. A mis hijos, nietos y demás personas con las que tengo vínculos profundos. A todos mis queridos exalumnos, que tuvieron la paciencia de escuchar mis enseñanzas.

1 Comentario

  1. Gracias por los datos, los mejores que encontré… búsqueda rápida por internet (por DuckDuckGo, asunto de seguridad de rastreos perversos)… sobre todo (sea gradece) la nota aclaratoria «D.L.E. prefiere callar»…muy acertada… los silencios son a veces como las mentiras; ocultan ignorancia de la soberbia monárquica que Corominas disipa… un poco.

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