varios
Dejar un comentario

pensión, pensionado, peso

Pensión (sustantivo femenino) 

Es la cantidad de dinero que alguien cobra periódicamente (cada cierto tiempo predeterminado) de forma temporal o vitalicia (de por vida), por razón de su situación (jubilación, vejez, viudez, orfandad o incapacidad) y no como pago de un trabajo. Recibo una pensión por jubilación.

Pago que reciben los parientes con derecho a ello, cuando ha muerto esa persona. Mientras viva la viuda, recibirá su pensión. Fondo de pensiones.

Un establecimiento hotelero pequeño, de una categoría más baja a la de un hotel, donde se proporciona alojamiento y comida a un costo (paga) relativamente reducido. Durante mi tiempo de brigadista viví en una pensión.

Ayuda económica que se da a quien se dedica a estudiar, hacer investigación científica o trabajos artísticos.

Estacionamiento privado o público donde los usuarios, mediante el pago de una cuota, pueden dejar el coche el tiempo que sea necesario.

Pensionado 

Adjetivo: Que cobra una pensión.

Sustantivo:  Internado. Establecimiento educativo donde permanece un internado.

La palabra ‘pensionado’ deriva del verbo pensionar, con la terminación -ado que indica “que recibe la acción de un verbo” y puede formar sustantivos o adjetivos: lesionado, de ‘lesionar’, abogado, de ‘abogar’, pensionado de ‘pensionar’. Del latín –atus, -atum, terminaciones adjetivales y nominales.

Diferencia entre jubilado y pensionado

“Jubilado” procede del verbo jubilar que significa “ordenar o disponer que, por motivo de vejez, largos servicios o imposibilidad —generalmente con derecho a pensión—, cese un funcionario en el ejercicio de su carrera laboral». En cambio, “pensionado” deriva de pensionar, dar una pensión, o sea, pagar periódicamente a una persona jubilada o que ya no trabaja. 

Así que si a una persona en esa condición le preguntan a qué se dedica, para fines prácticos es lo mismo que responda “soy jubilado” o “retirado», “soy pensionado”. Porque la pensión se la pagan al que ya se jubiló, o en los otros casos arriba citados.

Etimología de ‘pensión’

Pensión proviene del latín medieval pēnsiōnem, el acusativo singular (plural pēnsiōnēs) del femenino  pensĭo, ōnis, raíz pēnsiōn- (la acción de pesar, peso, pago, plazo para pagar, precio del alquiler que se pagaba al dueño de la tierra o de la casa), de  pēnsus (lo que ha sido pesado, estimado o apreciado), el participio pasado del verbo pendo, pendĕre (pesar, pagar, pesar el dinero; también apreciar, juzgar, examinar, estimar a alguien o algo en poco, menos o en nada. Finalmente de pendĕo, pendēre (‘pender’, ‘estar colgado’, ‘depender de’). 

Pensión < pēnsiōnem < pensĭo, ōnis < pēnsus < pendo, pendĕre < pendĕo, pendēre.

La terminación -ion

En la palabra pensión se encuentra la terminación -ion que puede indicar ‘acción de’, ‘hecho de’, ‘hecho de ser’, ‘resultado de’, ‘efecto de’, es decir, un sufijo de efecto y resultado. Terminación de sustantivos femeninos casi siempre abstractos, como en: opinión, profesión, indagación, elección, resurrección, decisión. La terminación -ión proviene del latín -ia.

¿Por qué? ‘pensión’ tiene que ver con la acción de pesar

Debido a que en la antigüedad no había monedas, sino que, para pagar por algo, había lingotes de metal de oro, plata, etc. (desde el tercer milenio a. C.) y tenían que pesarse (en un dispositivo donde las cosas tenían que colgarse)  para saber su valor adquisitivo y qué podía comprarse con ellos. Por lo tanto, “el dinero no se contaba sino que se pesaba”. 

El peso como unidad monetaria

La palabra ‘peso’, del adjetivo pensus (pesado, valorado, como en nihil pensi habuit, “nada le importó”), participio de pendo, pendĕre), como unidad monetaria de México, Argentina, Chile, Colombia, Filipinas, etc., debe su nombre al mismo origen. 

Inicia la acuñación de monedas

Pero luego surgió la acuñación de monedas por parte del Estado, que comenzó en Lidia, Asia Menor, durante el siglo VII a. C., muchas veces con un valor nominal superior al que intrínsecamente tenían como metal. Los romanos acuñaron monedas desde el siglo III antes de nuestra era.

‘Pensión’ como lugar donde alojarse y pago o subvención que recibe un estudiante

‘Pensión’ como nombre de una casa o establecimiento donde un huésped se aloja y consume alimentos a bajo precio, es una adaptación del francés pension (se documenta en esa lengua desde el siglo XIII, “pago”), que desde 1609 se usó para denominar «una casa donde uno se alimenta y aloja por cierto precio». Y con el sentido de «pago que recibe un estudiante», también del significado que se le dió en Francia: «establecimiento de enseñanza que proporciona, al mismo tiempo que la instrucción (1615). CNRTL en línea.

‘pensión’ en diccionarios españoles

Antonio de Nebrija (1495) dice: “pensión que se paga por alquiler: pensio”. 

La RAE de 1737 dice: “pensión. Carga anual que perpetua o temporalmente se impone sobre alguna cosa”.

Vínculos indoeuropeos de las palabras ‘pensión’, ‘pensar’, recompensa, etc.

La palabra ‘pensión’ se relaciona con la raíz indoeuropea *(s)pen-, *spen(d)- ‘estirar’, ‘alargar’, ‘tejer’, ‘hilar’. Recordemos que cuando se pesa algo, se cuelga y estira la báscula. Además, en latín, pensum era el peso de la lana que un esclavo debía hilar en cada jornada (Gaffiot p. 1138). 

Esta raíz IE tiene relación con palabras griegas y latinas. Como un ejemplo de ello, cito algunas derivadas del latín: apéndice, espontáneo, estipendio, depender, dependencia, imponderable, independencia, pensar, pensamiento (porque pensar presupone la idea de evaluar y ponderar), péndulo (porque cuelga o pende del reloj), propender, recompensa, peso (como unidad física y monetaria). 

En inglés spider (araña), porque a veces cuelga de la telaraña y pound (libra como unidad de peso y como moneda), del latín pondo, de pondus, a su vez de pendere, ‘lo relacionado con lo que pesan las cosas’. Lingüísticamente relacionada con ‘peso’ en español.

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 24 de junio de 2023.

Categoría: varios

por

Soy Jesús Gerardo Treviño Rodríguez, un profesor mexicano jubilado y además, ingeniero agrónomo con posgrado en parasitología agrícola. Durante más de un lustro colaboré en una página de etimologías, bien conocida por las personas que se interesan en esta fascinante área del conocimiento. Sin embargo, ahora deseo abordar temas etimológicos, pero además añadir, especialmente, contenidos históricos que fortalezcan el entendimiento de las palabras. No se sorprendan si encuentran contenidos tan disímiles. Me encanta saber, aunque sea algo de todo, o bueno, casi de todo. A los que les gusta la concisión, muy probablemente no tengan la paciencia de leer mis explicaciones, porque me agradan los detalles, y con mucha frecuencia anoto cosas algo alejadas del tema. Pero como aquí decimos "una cosa lleva a otra". Y no importa que eso suceda a menudo. Me encanta pasearme por el mundo de los datos. Echar a andar la imaginación. Precisamente por eso, el lema de Etimologías ¡mucho más! Vaya para todos los que venturosamente se topen con mis notas, una modesta invitación para que lean mis artículos, y expresen su opinión. Dedico este trabajo a la memoria de mi madre, Victoria Rodríguez Quintanilla (mayo de 1904 - abril de 1992), que fue profesora por más de 40 años. A mis hijos, nietos y demás personas con las que tengo vínculos profundos. A todos mis queridos exalumnos, que tuvieron la paciencia de escuchar mis enseñanzas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *