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catéter, cateterismo

Cateto y catéter comparten el componente griego κατά- katá- del radical κατ- (hacia abajo).

Cateto y catéter son dos palabras que tienen un origen griego, pero de esa lengua pasaron al latín y de ahí al español. El primero (cateto) es término geométrico, en cambio, catéter es un vocablo médico, pero ambos tienen en común el hecho de contener el mismo prefijo griego κατά- katá- del radical κατ- (hacia abajo).

Catéter es un tubo hueco y flexible

Un catéter es un tubo hueco y flexible que se inserta en una cavidad, un conducto, un vaso sanguíneo o linfático para permitir el paso de fluidos o distender su diámetro. Sus usos incluyen el drenaje de orina desde la vejiga a través de la uretra, la inyección de líquidos por vía endovenosa, la inserción a través de un vaso sanguíneo hasta el corazón con fines de diagnóstico, etc. Se sabe que los primeros cateterismos se hacían para hacer salir la orina de la vejiga durante la retención urinaria.

Catéter epidural junto a aguja abajo. https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Tuohy.jpg

La palabra «catéter» tiene origen griego

Căthĕtēr en latín tardío ya significa “sonda para las vías urinarias”, documentado en la obra Sobre las Enfermedades Agudas y Crónicas (De morbis acutis et chronicis) de Celio Aureliano, médico y escritor romano que vivió en el siglo IV d. C. También el término căthĕtērismus (del griego καθετηρισμόςkatheterismós”): «cateterismo, aplicación del catéter», aparece en esta misma obra. 

Căthĕtēr es un préstamo del griego antiguo

La palabra căthĕtēr fue tomada del griego καθετήρ kathetḗr “lo que hace caer”, “lo que empuja hacia abajo”, “sonda quirúrgica para vaciar la vejiga” en escritos de Galeno, “que hace bajar”, porque al introducir el catéter en la vejiga, la orina “baja por la cánula”. También llegó a usarse el término con el significado de “sedal” o trozo corto de hilo fino y muy resistente que se ata por un extremo al anzuelo y por el otro a la cuerda que pende de la caña de pescar (DLE) y “collar de mujer” porque pende o cuelga del cuello. 

Καθετήρ deriva a su vez del verbo καθιέναι kathiénai  “echar o lanzar hacia abajo, descender, dejar caer”, formado por: 1) kat-, kata- “hacia abajo”, como en los antiguos términos catarro, catástrofe y cadera, y en los neologismos catión, catabolismo, catatonia y catálisis. Más 2) el verbo, ἱέναι hiénai, “echar”, “tirar”, “enviar”, “poner en movimiento”. Entonces kathiénai es “echar (-hiénai) algo hacia abajo (kat-)”.

Sufijo -τήρ -tḗr

Finalmente, kαθετήρ lleva el sufijo -τήρ (-tḗr) que hace sustantivos a partir de verbos y que indica “instrumento”, “que hace”, porque, en origen, el catéter hace bajar la orina que está retenida en la vejiga.

El verbo ἱέναι hiénai se vincula a la raíz indoeuropea *i̯ē- : i̯ǝ- (también *yē-),                               que contiene la idea de ‘arrojar’ (véase aquí). Palabras como eyaculación, eyacular, proyecto, adjetivo, conjeturar, jactancia, jet, enema, inyección, yacimiento, yacer, subyacente y otras se vinculan a esta misma raíz IE.

Desde hace al menos unos 5000 años se practicaba el cateterismo

Se sabe que al menos desde el milenio II antes de Cristo, los pueblos antiguos como Egipto, China, India y después Grecia practicaban el cateterismo en personas con retención urinaria, utilizando paja, hojas de cebolla y algunos tubos metálicos. Así que quizá la vejiga urinaria fue el primer órgano en ser cateterizado.

En tiempos modernos 

Con el avance espectacular de la medicina, ahora se practican muchos tipos de cateterismo: uretral, cardíaco, arterial, central, de la trompa de Eustaquio, de la arteria pulmonar, intravenoso, preesternal, prostático, epidural, suprapúbico y otros.

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 14 de enero de 2025.

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Soy Jesús Gerardo Treviño Rodríguez, un profesor mexicano jubilado y además, ingeniero agrónomo con posgrado en parasitología agrícola. Durante más de un lustro colaboré en una página de etimologías, bien conocida por las personas que se interesan en esta fascinante área del conocimiento. Sin embargo, ahora deseo abordar temas etimológicos, pero además añadir, especialmente, contenidos históricos que fortalezcan el entendimiento de las palabras. No se sorprendan si encuentran contenidos tan dispares. Me encanta saber, aunque sea algo de todo, o bueno, casi de todo. A los que les gusta la concisión muy probablemente no tengan la paciencia de leer mis explicaciones, porque me agradan los detalles, y con mucha frecuencia anoto cosas algo alejadas del tema. Pero como aquí decimos "una cosa lleva a otra". Y no importa que eso suceda a menudo. Me encanta pasearme por el mundo de los datos. Echar a andar la imaginación. Precisamente por eso, el lema de Etimologías y ¡mucho más! Vaya para todos los que venturosamente se topen con mis notas, una modesta invitación para que lean mis artículos, y expresen su opinión. Dedico este trabajo a la memoria de mi madre, Victoria Rodríguez Quintanilla (mayo de 1904 - abril de 1992), que fue profesora por más de 40 años. A mis hijos, nietos y demás personas con las que tengo vínculos profundos. A todos mis queridos exalumnos, que tuvieron la paciencia de escuchar mis enseñanzas.

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