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reptil, reptiliano, dinosaurio

Reptil, reptiliano, definiciones

Reptil en zoología es cualquier especie de la clase Reptilia, de vertebrados tetrápodos, ovíparos u ovovivíparos y poiquilotermos o de sangre fría; provistos de pulmones, un esqueleto totalmente óseo, el cuerpo cubierto de escamas o placas córneas. Un corazón con dos aurículas y usualmente un solo ventrículo. En esta clase se incluyen serpientes, tortugas, galápagos, cocodrilos, caimanes, gaviales, iguanas, camaleones, lagartos o saurios, dinosaurios. Hay algo más de 6000 especies en todos los continentes, excepto en la Antártida. En sentido figurado, una persona arrastrada, servil, vil, innoble, que se humilla; usado así desde el siglo XVIII.

Reptiliano (adjetivo). Relacionado con los reptiles, que tiene las características de un reptil, como las patas de las aves que poseen escamas, una muestra de que tuvieron su origen, hace millones de años, en los reptiles.

Reptiliano proviene del latín reptilia, pero se trata de un neologismo del siglo XIX. Reptiliano se forma de: reptil + -ano, del sufijo latino -anus que indica (en este caso) pertenencia a cierto grupo taxonómico.

Etimología de “reptil”

La palabra reptil deriva del latín tardío y eclesiástico reptile, atestiguado primero en la Biblia Vulgata (siglo III d. C.) con el sentido de ‘serpiente’ en el Génesis 1:24, y después en escritos altomedievales de Isidoro de Sevilla (siglos VI-VII). El sustantivo reptile es la forma neutra del adjetivo reptĭlis (que se arrastra al andar, que repta), de rept-, la raíz del participio pasado del verbo rēpo, repĕre que significa “arrastrarse los seres vivos”, “marchar con dificultad o con lentitud”; hablando de niños, “andar a gatas”, “dar sus primeros pasos”.

Sermones repentes per humum (Horacio): “discursos escritos en estilo arrastrado o servil”. Millia tum tria reprimus (Horacio): “anduvimos lentamente, con dificultad, tres millas”.

Debe aclararse que el sustantivo “reptil” comenzó a tomar sentido biológico a mediados del siglo XVIII. Inicialmente, para denominar tanto a los anfibios como a los reptiles, pero pronto se estableció la diferencia: Amphibia L, 1758 y Reptilia Laurenti, 1768.

Reptiles, de Nouveau Larousse Illustré , 1897-1904, observe la inclusión de anfibios (debajo de los cocodrilos). Imagen tomada de https://en.wikipedia.org/wiki/Reptile#/media/File:Reptile003d.jpg

los primeros reptiles aparecieron durante el Carbonífero

Los primeros reptiles (géneros Hylonomus, Hyperodapedon, Kannameyeria y otros) aparecieron en la era Paleozoica y el período Carbonífero entre 360-286 millones de años. En el siguiente período, el Pérmico 286-245 m. de a., se diversifican los reptiles y comienzan a declinar los anfibios. 

Los dinosaurios

Los dinosaurios fueron un grupo de reptiles que vivieron en nuestro planeta durante unos 165 millones de años, entre el Triásico y el Cretáceo de la era Mesozoica. Se extinguieron hace 65 millones de años.

Dinosaurios es un neologismo decimonónico de origen griego que quiere decir “lagarto terrible”: deinos δεινός (terrible) + sauros σαῦρος (lagarto) y acuñado en 1842 por el profesor inglés Richard Owen.

Ilustración de Brontosaurus en el agua y Diplodocus en tierra. 1897. Carlos Roberto Caballero  (1874-1953). Imagen de https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Pasta-Brontosaurus.jpg

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 3 de marzo de 2024.

Categoría: ciencia

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Soy Jesús Gerardo Treviño Rodríguez, un profesor mexicano jubilado y además, ingeniero agrónomo con posgrado en parasitología agrícola. Durante más de un lustro colaboré en una página de etimologías, bien conocida por las personas que se interesan en esta fascinante área del conocimiento. Sin embargo, ahora deseo abordar temas etimológicos, pero además añadir, especialmente, contenidos históricos que fortalezcan el entendimiento de las palabras. No se sorprendan si encuentran contenidos tan disímiles. Me encanta saber, aunque sea algo de todo, o bueno, casi de todo. A los que les gusta la concisión, muy probablemente no tengan la paciencia de leer mis explicaciones, porque me agradan los detalles, y con mucha frecuencia anoto cosas algo alejadas del tema. Pero como aquí decimos "una cosa lleva a otra". Y no importa que eso suceda a menudo. Me encanta pasearme por el mundo de los datos. Echar a andar la imaginación. Precisamente por eso, el lema de Etimologías ¡mucho más! Vaya para todos los que venturosamente se topen con mis notas, una modesta invitación para que lean mis artículos, y expresen su opinión. Dedico este trabajo a la memoria de mi madre, Victoria Rodríguez Quintanilla (mayo de 1904 - abril de 1992), que fue profesora por más de 40 años. A mis hijos, nietos y demás personas con las que tengo vínculos profundos. A todos mis queridos exalumnos, que tuvieron la paciencia de escuchar mis enseñanzas.

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