Jesucristo, Jesús
Desde el siglo I d. C. comenzaron a llamar a Cristo «Jesucristo»
Jesucristo es el nombre con el que comenzó a llamársele a Cristo desde el siglo I d. C., a pocas décadas después de su crucifixión. “Jesucristo” se registra en latín eclesiástico como Iesoûs Christós, con dos componentes: Iesoûs o Jēsus Christós —literalmente “Jesús el ungido», que luego quedó como Jesucristo en español—, como solían llamarlo sus discípulos y también, entre otros, Pablo de Tarso (nació en Tarso, Cilicia alrededor del año 10 y murió en Roma hacia el 67 d. C.), un personaje de orige judío, pero conocedor de la cultura y costumbres grecorromanas.
Pablo de Tarso era fariseo de alma y corazón, que vio en el cristianismo una herejía peligrosa y la combatió ardorosamente… Pero un día, cuando se dirigía a Damasco, oyó la voz celestial de Jesús en medio de un resplandor que le cegó, y se convirtió a la nueva fe en el año 34. Pablo fue bautizado por Ananías y comenzó la predicación del Evangelio con el mismo entusiasmo que había puesto antes en combatirlo.
«Jesús el Cristo», Jesús el ungido», ya que la unción era una práctica común en todos los pueblos de la región mediterránea de aquellos siglos, y se hacía a personas —sacerdotes, profetas y reyes— consideradas enviadas de Dios y que tenían una misiones sagradas que cumplir.
Los componentes del nombre Jesucristo, Iesoûs Christós, “Jesús el ungido”. Se trata de un nombre híbrido: Jesús de origen hebreo y Cristo de origen griego

Jesucristo, salvador del mundo (siglo XVII). Colección de la Iglesia de Santa Bárbara. Bogotá, Colombia. https://es.wikipedia.org/wiki/Jes%C3%BAs_de_Nazaret#/media/Archivo:Jesucristo,_salvador_del_mundo.jpg
1- Iesoûs, Jēsūs, Jesús
Iesoûs, Ĭēsūs, Jēsūs o Jēsus y Jēsus Christus (Jesucristo) en latín, proviene del griego Ἰησοῦς (Iesous), a su vez del antiguo arameo יֵשׁוּעַ (Yeshu’a) que se traduce como “Dios salva”, “El Salvador”. Yeshua es un acortamiento de Yehoshua (יְהוֹשֻׁעַ) que se traduce como “Dios es la Salvación”, un derivado de יְהוֹ (yeho), y del verbo semítico יָשַׁע (yashaʿ), “salvar”, “liberar”, “redimir”. Sin duda, Jesucristo es el personaje principal del Nuevo Testamento y el indiscutible origen del cristianismo.
Según los cuatro libros del Evangelio —Marcos, Mateo, Lucas y Juan—, Jesús es el hijo de Dios y de la Virgen María, en cumplimiento de las profecías del Antiguo Testamento, según las cuales, “Ha de venir un Mesías —un ungido— a redimir a la humanidad”.
En textos bíblicos, Jesús puede aparecer como Ieosus (en Biblia griega), Yehoshua, Yeshua (Biblia hebrea), Iesus, Iosue (B. latina). En árabe cristiano Yasuʿ, en árabe Essa, Isa, Issa, Yusaha; así como Yeshuʿ en siríaco, Ishoʿ en asirio, etc.
El nombre de “Jesús” ya existía en los tiempos del Moisés bíblico
Como ejemplo de que el nombre Josué, Jesús (en hebreo Yehoshuaʿ = יְהוֹשֻׁע que significa “Jehová es el Salvador” o “Yahvé salva”) ya se usaba en los tiempos de Moisés, podemos leer lo que dice el libro de Éxodo 17:9: “Y dijo Moisés a Josué (entiéndase Jesús): Escógenos varones, y sal a pelear contra Amalec; mañana yo estaré sobre la cumbre del collado, la vara de Dios en mi mano”. El Éxodo fue escrito hacia el siglo XV antes de Cristo, entonces Jesús es un nombre que debe tener al menos unos 3500-4000 años o tal vez más.
¿Quién le dio el nombre a Jesús de Nazaret?
Ya se dijo que “Jesús” es un nombre hebreo muy antiguo. Pero a Cristo le fue dado ese nombre por instrucciones de Dios. En Lucas 1:31 podemos leer: “Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús”. Palabras del Ángel Gabriel —enviado por Dios a la ciudad de Nazaret en Galilea— dirigidas a María.
2- Christus, Cristo, el segundo componente de “Jesucristo”
Es importante remarcar que el nombre de Cristo era Jesús (en hebreo Yeshua “El Salvador”), impuesto por Dios a través de un ángel, según Lucas 1:31 y 2:11. Sin embargo, Cristo (el ungido) es un título indisolublemente asociado con Jesús, tanto así, que terminó siendo parte de su nombre, esto es, «Jesucristo» o “el hijo de Dios hecho hombre”. Asimismo, Cristo (Christus en latín, Christós en griego, “El ungido”) es una traducción de məšiḥā (“mesías” o “el ungido”) en arameo, por eso también suele decirse Jesús el Mesías.
“Cristo” deriva del latín Christus, citado por Plinio el Viejo y el historiador romano Tácito. Pero Christus fue tomado del griego Χριστός = Khristós o Christós, que literalmente significa “El ungido”, derivado a su vez de χριστός = christós, khristós “estar ungido”. Esta voz está atestiguada en la obra Hipólito (Ἱππόλυτος, Hyppolitus) del dramaturgo griego Eurípides (siglo V a. C.), hacia el año —428.
La palabra griega χριστός deriva del verbo χρίω, χρῑειν
La palabra χριστός = christós, khristós “estar ungido” y por lo tanto el nombre Χριστός = Khristós o Christós, es decir, Cristo, deriva del antiguo verbo griego χρίω, χρῑειν chrío, chriein que significa —desde los tiempos de Homero, hace unos 2800 años—“frotar”, “ungir”, “untar aceite después del baño”, o “a un muerto para su funeral”. Siglos después, χριστός significó también “untar o ungir para una consagración”, según la Biblia griega Septuaginta (LXX), una traducción de la Biblia hebrea hecha probablemente por judíos egipcios más o menos entre 280-110 a. C. Si quieres más detalles sobre este tema, te recomiendo que leas las entradas “Cristo, Mesías” e «INRI«.
Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 12 de diciembre de 2025.