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púlpito, pupitre, ambón

definiciones de ‘púlpito’ y ‘pupitre’

Un púlpito es una plataforma elevada con antepecho, un estrado desde el cual un orador se dirige a una audiencia. Específicamente, en la iglesia cristiana se utiliza para que el sacerdote pronuncie un sermón o para conducir algunos oficios religiosos.

Pupitre es un mueble de madera que en su parte superior tiene una tapa en forma de plano inclinado y sirve para escribir sobre él.

File:AachenerDomKanzel.jpg
Ambón o púlpito de Enrique II en la catedral de Aquisgrán (Alemania). Autor: Lokilech. Imagen de https://commons.wikimedia.org/wiki/File:AachenerDomKanzel.jpg

Etimología de ‘púlpito’

La palabra púlpito proviene del latín clásico, posclásico, tardío y medieval pulpĭtum que significa ‘un escenario elevado en los teatros’, ‘una plataforma o entarimado’, ‘sitio de honor elevado’, ‘un atril’. El verbo pulpitāre significa ‘entarimar’, ‘entablar’. Estos términos están documentados en escritores romanos como Suetonio, Juvenal, Horacio, Vitruvio, y ya en el período alto medieval Isidoro de Sevilla (556-636).

Sinónimos de pulpĭtum

1- Suggestum es una palabra latina que significa también ‘púlpito’, ‘tribuna’, ‘sitio eminente para hablar en público’; deriva del verbo suggĕro, que entre otras cosas, significa ‘construir’, ‘erigir’, ‘levantar’, ‘apilar algo’. 

2- Ambón significa “púlpito o atril para leer o cantar en las funciones litúrgicas, los dos situados normalmente a uno y otro lado del altar mayor, uno para la epístola y otro para el evangelio, o en algunas iglesias antiguas a los lados del coro” (DLE 2022).

Ambón deriva del latín ambo, pero este término fue tomado del griego antiguo ámbōn 

Esta palabra (sustantivo masculino) proviene del latín eclesiástico ambo, -ōnis, que significa también ‘púlpito’, ‘tribuna’, ‘plataforma elevada’, ‘atril’. Ambo es un derivado de la antigua palabra griega ᾃμβων (ámbōn), que en origen significa: ‘saliente redondeada o prominencia’, como de una colina; ‘el borde redondeado de una copa’; también ‘los labios vulvares’, ‘cualquier saliente carnosa en forma de ceja o labio (en Galeno). Pero luego significó ‘púlpito o atril para leer’; el mismo nombre (ᾃμβων) de un poema, escrito en griego bizantino por Paulus Silentiarius (Παῦλος ὁ Σιλεντιάριος en griego), que vivió durante el siglo VI d. C.

Ambō, -ōnis y ambō son palabras latinas, pero con distinto significado

Es muy importante no confundir ambō, -ōnis (púlpito, tribuna) con el adjetivo también latino ambo que significa ‘ambos’, ‘el uno y el otro’ (Gaffiot p. 112) y que guarda cierta relación con el griego ᾃμφω (ámpho), y el sánscrito uphau, que esencialmente significan lo mismo.

Pupitre, un galicismo

La palabra ‘pupitre’ deriva del francés pupitre, con igual significado, y también proviene del latín pulpĭtum. El primer registro de la palabra es de 1357, ‘pepistre’ de l’eglise, “atril, pupitre de la iglesia” (mueble hecho de un plano inclinado para poner libros, atril). En 1374, ‘pulpite’ (púlpito). Año 1529, ‘popistre’ (que sirve para escribir, para los que estudian). Ahora se escribe (en francés) ‘pupitre’, como pueden ver en este enlace del diccionario Larousse en línea.

El vocablo ‘pupitre’ (mueble que forma un plano inclinado…) lo recoge el diccionario de Vicente Salvá (año 1846). La RAE de 1852 ya incluye la palabra, pero hasta 1884 dice que deriva del francés pupitre. A juzgar por las fechas, es muy probable que ‘pupitre’ se haya usado en español desde finales del siglo XVIII.

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 21 de septiembre de 2022.

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Soy Jesús Gerardo Treviño Rodríguez, un profesor mexicano jubilado y además, ingeniero agrónomo con posgrado en parasitología agrícola. Durante más de un lustro colaboré en una página de etimologías, bien conocida por las personas que se interesan en esta fascinante área del conocimiento. Sin embargo, ahora deseo abordar temas etimológicos, pero además añadir, especialmente, contenidos históricos que fortalezcan el entendimiento de las palabras. No se sorprendan si encuentran contenidos tan dispares. Me encanta saber, aunque sea algo de todo, o bueno, casi de todo. A los que les gusta la concisión muy probablemente no tengan la paciencia de leer mis explicaciones, porque me agradan los detalles, y con mucha frecuencia anoto cosas algo alejadas del tema. Pero como aquí decimos "una cosa lleva a otra". Y no importa que eso suceda a menudo. Me encanta pasearme por el mundo de los datos. Echar a andar la imaginación. Precisamente por eso, el lema de Etimologías y ¡mucho más! Vaya para todos los que venturosamente se topen con mis notas, una modesta invitación para que lean mis artículos, y expresen su opinión. Dedico este trabajo a la memoria de mi madre, Victoria Rodríguez Quintanilla (mayo de 1904 - abril de 1992), que fue profesora por más de 40 años. A mis hijos, nietos y demás personas con las que tengo vínculos profundos. A todos mis queridos exalumnos, que tuvieron la paciencia de escuchar mis enseñanzas.

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