ciencia, cultismos
Dejar un comentario

idiota, idiocia

Idiota e idiocia, concepto y significado

El Diccionario de la Lengua Española dice que el término “idiota” es un adjetivo, pero en el lenguaje coloquial suele usarse como sustantivo. Aquella persona que está sentada bajo el árbol es un idiota, porque padece un severo retraso mental.

Mentalmente retrasado, igual o menor al desarrollo mental de un niño de tres años. Tonto, estúpido, imbécil, menso, mentecato. Que carece de toda instrucción. Que padece idiocia.

“Idiocia” es la condición de ser idiota. Gran estupidez. Antes también “idiota” significaba ‘que carece de toda instrucción, gran ignorancia. «Idiocia lleva el sufijo griego de cualidad -ίᾱ (-íā).

Como sustantivo, “idiota” significa: “persona considerada como tonta o idiota”; “una persona con profunda incapacidad intelectual, con una edad mental por debajo de los tres años, y generalmente incapaz de sostener una conversación o cuidarse de los peligros comunes. El término pertenece a un sistema de clasificación que ya no se utiliza y que ahora se considera ofensivo.” (The American Heritage dictionary online).

El término “idiota” fue muy usado en contextos psiquiátricos y legales, pero ya no se utiliza. Ahora se habla de “profundo retraso mental”, con una intrincada terminología propia de los psiquiatras. Hoy por hoy, “idiota” se considera una denominación ofensiva, hiriente e injuriosa.

Etimología del término “idiota”

La palabra idiota es un cultismo, porque ya existía como tal desde la antigüedad griega y romana, pero el significado original era el de una persona que se mantenía en la privacidad o intimidad, que no se metía en asuntos públicos. Luego pasó a significar “individuo ignorante que carece de conocimientos en cualquier área del saber”. Los primeros  diccionarios españoles  dicen más o menos lo mismo:

Diccionario Toscano-Castellano San Cristóbal de las Casas (1570): Idiota. Idiota.

Richard Percival (1519): “Idiota. Seglar, lego, laico. Costumbres del siglo o mundo.

Francisco del Rosal (1611): “Idiota en griego quiere decir el ignorante y necio y el que no es de cuenta ni tiene oficio público, y el que no sabe más que un idioma.”

RAE (1734): “El ignorante, el que no tiene letras. Unos le derivan de la voz griega Idioma; y así significa el que solo sabe su lengua sin otras letras. Otros le derivan de la voz Idiotis Griega, que quiere decir hombre plebeyo, o del vulgo. Latín Idiota. Y sigue con una cita de Cervantes, tomo I capítulo 22 “por andar este oficio y exercicio entre gente idiota y de poco entendimiento”. Y otra de Francisco de Quevedo “yo soy el autor de los idiotas, y el texto de los ignorantes.

Finalmente, en 1853, el diccionario de Ramón Joaquín Domínguez, dice: “Idiota. Sustantivo. La persona estúpida, ignorante en sumo grado, de absoluta incapacidad intelectual ‖ Medicina. La persona que padece idiotez ‖ se usa más generalmente como adjetivo y dice que idiotez, sustantivo femenino es crasa ignorancia, estolidez (falto de razón), imbecilidad 

Primeros escritos que revelan a “idiota” como una condición de retraso mental, datan desde el siglo XVI

El británico Henry Swinburne (c. 1560-1623), en su obra de de 1590 A Brief Treatise of Testaments (Un breve tratado de los testamentos), escribió:  An Idiot canot make a testament (Un idiota no puede hacer un testamento). Pero desde los inicios del siglo XIV ya se registra en inglés como “Persona que padece tal deficiencia mental, que es incapaz de mostrar un razonamiento normal”; “Un individuo deficiente en sus facultades intelectuales, y, por lo tanto, incapaz de una conducta racional”, “que es congénitamente deficiente para poder razonar, un “tonto intelectual”. En el francés antiguo (entre los siglos IX-XIV) era una persona ordinaria e ignorante. 

“Idiota” es una palabra que tiene origen grecolatino

Si retrocedemos a la antigüedad, “idiota” viene del latín clásico ĭdĭōta, ĭdĭōtĭcus significa: “que no tiene conocimiento alguno”, “un profano”, “un ignorante” o inculto, no educado, no instruido,  en escritos del Cicerón (siglo I a. C.); en latín tardío, ĭdĭōtĭcus, “un ignorante”; ĭdĭōtĭcē, adverbio que significa “torpemente”, “en estilo rudo u ordinario”.

Asimismo, ĭdĭōta es un préstamo del griego antiguo ἰδιώτης (idiṓtēs): Persona sin conocimientos, sin erudición, un patán o zafio. Que lleva una vida privada y alejada de lo público o los asuntos del Estado. Hombre común, plebeyo, populachero, vulgar. Como adjetivo: que lleva una vida sólo relacionada con el hogar. No tener habilidades especiales, mal informado, según escritos de Hipócrates, Platón y Tucídides.

Elementos compósitivos de “ἰδιώτης” (idiótes)

ἰδιώτης (idiótes) se compone de: 

A) El término ἴδιος (idios) es “lo propio de cada quien”, “separado”, “peculiar”, “no público”. Más B) el sufijo griego que hace sustantivos -της (-tēs) y que significa “destinado o dedicado a”, pero ya en castellano se vuelve -ta. Luego entonces, en origen, “un idiota era el  que se de dedicada  (-της,  -tēs a vivir en su casa, de una manera privada ἴδιος, idios). Este sufijo también forma parte de palabras como diabetes, carótida, catarata y terapeuta.

Existen muchas palabras griegas antiguas derivadas de ἴδιος (idios)

  • ἰδιοσυγκρασία (idiosunkrasía), el temperamento peculiar o los hábitos propios de cada quien. Ahora ‘idiosincrasia’.
  • Ἰδιοποιέω (idiopoiéo), hacer algo por separado uno mismo. 
  • Ἰδιοπαθέω (idiopatheo), estar uno particularmente afectado de alguna dolencia (Galeno). 

ἴδιος (idios) y sus nexos indoeuropeos

 ἴδιος (idios) y la gran cantidad de términos derivados (idioma, idiota, idiocia, idiopático, idiomático, idiosincrasia, idiográfico, idiolecto (rasgos peculiares en la forma de expresarse de cierta persona, etc.), tiene vínculos con la raíz indoeuropea *swe-, *se-, que generó pronombres reflexivos, como me, te, se, mi, ti,; también sí mismo, uno mismo, interés personal, etc. Esta raíz generó una muy amplia gama de vocablos en griego, latín y muchas otras lenguas, que el lector puede revisar en este sitio. También puede consultarse mi artículo “sobrio”, “sobriedad”.

De la raíz IE *s(w)e- derivan muchos términos de uso común. Sólo por mencionar algunos: consuetudinario, costumbre, desolado, ética, etología, idiograma, idioma, idioplasma, idiosoma, idiota, idiosincracia, idiopático, suicidio, secreto, secretario, ética, segregar, secreto, secretario, seducción, segregación, separar, selección, sobrio, sobriedad, soledad, soliloquio, soltero, etc.

Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 5 de febrero de 2024.

Categoría: ciencia, cultismos

por

Soy Jesús Gerardo Treviño Rodríguez, un profesor mexicano jubilado y además, ingeniero agrónomo con posgrado en parasitología agrícola. Durante más de un lustro colaboré en una página de etimologías, bien conocida por las personas que se interesan en esta fascinante área del conocimiento. Sin embargo, ahora deseo abordar temas etimológicos, pero además añadir, especialmente, contenidos históricos que fortalezcan el entendimiento de las palabras. No se sorprendan si encuentran contenidos tan disímiles. Me encanta saber, aunque sea algo de todo, o bueno, casi de todo. A los que les gusta la concisión, muy probablemente no tengan la paciencia de leer mis explicaciones, porque me agradan los detalles, y con mucha frecuencia anoto cosas algo alejadas del tema. Pero como aquí decimos "una cosa lleva a otra". Y no importa que eso suceda a menudo. Me encanta pasearme por el mundo de los datos. Echar a andar la imaginación. Precisamente por eso, el lema de Etimologías ¡mucho más! Vaya para todos los que venturosamente se topen con mis notas, una modesta invitación para que lean mis artículos, y expresen su opinión. Dedico este trabajo a la memoria de mi madre, Victoria Rodríguez Quintanilla (mayo de 1904 - abril de 1992), que fue profesora por más de 40 años. A mis hijos, nietos y demás personas con las que tengo vínculos profundos. A todos mis queridos exalumnos, que tuvieron la paciencia de escuchar mis enseñanzas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *