Significados
Existen tres palabras ‘pecho’ homógrafas, con la misma escritura pero con diferente etimología y significado.
1- PECHO, del latín pectus, pectoris (‘pecho’, ‘valor’, ‘sentimiento’). En el humano, parte superior del tronco, desde el cuello al abdomen o vientre, y en cuya cavidad están los pulmones y el corazón. Parte anterior del tronco de los cuadrúpedos entre el cuello y las patas delanteras. Cada una de las mamas de la mujer y ambas.
En sentido figurado, el interior de la persona desde el punto de vista moral; la sede de las emociones o sentimientos; valor, esfuerzo, fortaleza, constancia. Calidad de la voz y sostenimiento para cantar o discursear. El aparato respiratorio para aludir a “las enfermedades del pecho”.
Algunas expresiones con el vocablo ‘pecho’
Tengo mi pecho limpio. Libre de culpas.
Gritar a pecho abierto. Fuerte, para que todo el mundo lo oiga.
De pechito. Cuando se tiene, por ejemplo, una presa de cacería en frente, justo para disparar.
A lo hecho pecho. Expresión que recomienda tener fortaleza para afrontar las consecuencias de una desgracia o error, que ya son irremediables.
Dar pecho. Dar de mamar, amamantar.
Niño de pecho. El que todavía mama de su madre o nodriza.
Se me parte el pecho. Por alguien o algo que se encuentra en condiciones muy lastimosas.
Tomárselo muy a pecho. Cuando alguien toma muy en serio algo que quizá no sea tan trascendente; por eso a veces se le dice a una persona: «no lo tomes tan a pecho, las cosas no son tan graves como tú crees».
Sinónimos
Tórax, caja torácica, torso, busto, seno, mama, teta, escote, pechera; brío, valor, coraje, fortaleza, ánimo.
2- PECHO, del latín pactum (‘pacto’, ‘convenio’). Un término histórico que se refiere a la baja Edad Media. Era el nombre que se daba en Castilla y León a la renta, tributo o censo, pagado por los labriegos o villanos (el habitador en estado llano en una aldea o villa) al rey o a cualquier otra autoridad por el usufructo de una tierra.
3- PECHO, término usado sobre todo en Asturias, León y Salamanca (España), del latín vulgar pestŭlus (‘pestillo’, ‘cerradura’, ‘pasador que asegura una puerta’).
Etimología de la palabra pecho (primer significado)
Esta palabra procede del latín pectus, ŏris (Gaffiot, p. 1130) que quiere decir, ‘el pecho en hombres y animales’; pero también se usó en la antigüedad con la connotación de ‘sentimiento’, ‘corazón’, ‘alma’, ‘espíritu’, ‘entendimiento’, ‘memoria’, ‘pensamiento’, reflexión’, ‘afecto’, ‘amor’, ‘valor’, ‘lugar donde residen el afecto, coraje, disposición, ánimo’. Y es que nadie puede negar que las emociones, sentimientos y otras afecciones o pasiones del ánimo las sentimos en el pecho, en nuestro corazón.
Algunas frases clásicas con pectum
Pectus bene praeparatum (Horacio): ‘corazón bien puesto’.
Pectore toto (Cicerón): ‘con toda el alma’.
Ut in pectora irrumpat orator (Quintiliano): ‘para que el orador se apodere de los corazones’.
Mollities pectoris (Ovidio): ‘ternura del alma’.
Oculis pectoris (Ovidio): ‘con los ojos del alma’.
Labi pectore (Virgilio): ‘olvidarse’, ‘irse algo de la memoria’.
Relación indoeuropea
La palabra pectus, ŏris, de la hipotética variante sufijada *pek-tos-, se relaciona con la raíz indoeuropea *peg- (pecho, costado, hombro), también asociada a pakṣa (ala) en sánscrito. Palabras como apretar, pectoral, pechuga, apechugar, pechada, pechal, pechamen y expectorar se vinculan también a esta raíz.
Expectoración
Expectoración es la acción o efecto de arrojar saliva con material procedente de los pasajes o vías aéreas; arrancar y arrojar por la boca moco y flemas que se acumulan en la faringe, laringe, tráquea y bronquios. Este material puede ser también mucopurulento, seroso o espumoso. Expectorante es un agente que afloja las secreciones bronquiales para que sean expulsadas por la tos, como la guaifenesina.
Origen de ‘expectoración’
El término expectoración deriva del verbo expectŏro, āre, (Gaffiot, p. 628) que originalmente significaba, ‘echar del pecho’, ‘eliminar o sacar del corazón’; del prefijo ex-, ‘fuera de’ más pectus, ‘pecho’. Esta palabra está documentada desde el latín preclásico, en escritos del poeta épico latino nacido en la Magna Grecia (al sur de Italia), Quinto Ennio (239-169 a de C.). Se le atribuye la frase “pavor sapientiam omnem mihi ex animo expectorat” (el pavor aleja de mi alma toda sabiduría). En el siglo I a. C. Cicerón también usa el verbo.
Jesús Gerardo Treviño Rodríguez. 19 de octubre de 2021.